Que el Ecommerce o comercio electrónico está experimentando un auge espectacular en España no es un secreto a día de hoy. La Comisión del Mercado de las telecomunicaciones, nos presenta un informe en el que aseguran que el volumen totalizado de comercio electrónico ascendió a 2,82 billones de euros en 2013. Cerca de 11 millones de españoles realizaron alguna compra on-line en 2013, lo que supone el 31,5% de la población española, avalado por los datos oficiales del INE. Una vez que todas las grandes marcas han pasado de tener páginas web informativas (algunas lamentablemente malas), a disponer de plataformas de venta on-line que nada tienen que envidiar a sus tiendas físicas en las mejores calles de las principales ciudades españolas, queda evidenciado la importancia del canal de venta por Internet en todos y cada uno de los sectores de negocio, desde la alimentación hasta la automoción, pasando por la moda, el material oficina, los sellos de caucho, la pesca, las mascotas… podríamos enumerar varias en cada sector y sin hacer siquiera una búsqueda muy exhaustiva.
Las grandes beneficiadas a modo de «daño colateral» son las agencias de mensajería y paquetería, que estaban sumidas en una batalla campal por las tarifas en la mensajería urgente, dónde el pastel era cada vez más pequeño y había más competidores de los que el mercado podía alimentar. Gracias al crecimiento de las ventas por Internet, necesitadas de entregas de paquetería, ahora hay pastel para todas y es el consumidor el que va a sacar partido del servicio, porque ahora lo que preocupa no es ser el más barato, sino dar el mejor servicio de entrega posible para ser el aliado estratégico de las tiendas en la fase más crítica del proceso de compra online: la entrega de los bienes.
La llegada de los buzones de recogida de paquetes 24 horas 7 días a la semana, es un hecho. Lo que no sabemos es la efectividad de estos sistemas que funcionan en otros países, pero que luego no cuajan en España por motivos dignos de estudio por sociólogos expertos. La Sociedad Estatal Correos y Telégrafos, como no podía ser de otra manera, fue de las primeras en enseñar sus cartas e informar de su servicio HomePaq, más que nada porque ya le estaba viendo las orejas al lobo. Que sepamos, al menos otros tres players están en lo mismo, ofreciendo casilleros dotados de máxima seguridad para ofrecer a los compradores interneteros que puedan recoger los paquetes cuando quieran y dónde quieran. Se acabaron los horarios un tanto restrictivos de las agencias que trabajan de lunes a viernes, las que solo abren los sábados por las mañanas o las que te dicen que el paquete está en ruta y nunca llega, simplemente porque al mensajero «no le viene bien pasarse».
Se acabó lo de tener que estar en casa sin moverte porque te van a traer un paquete entre las 9h y las 19h. Aquí tienes una muestra de los «buzones inteligentes» que hay y habrá en España en los próximos meses:
- My Pick Box: Ganadores del primer Programa Lanzadera, disponen de consignas en el Metro de Valencia y estaciones de Cercanías de Madrid en las que poder recoger los paquetes que el usuario haya decidido retirar de uno de sus puntos My Pick Box.
- HomePaq: Servicio de Correos de consignas para recogida y entrega de paquetería, que se instala en comunidades de 40 o más vecinos, inicialmente promovido en Madrid para posteriormente llevarlo a otras ciudades.
- InPost: De la mano de ASM como proveedor local en España, el servicio de paquetería de origen polaco, que ya cuenta con más de 3.500 consignas por toda Europa, pretende instalar unos 500 puntos de recogida principalmente en supermercados y centros comerciales.
- Drop-Point: Permite a los usuarios recoger los paquetes con un coste de lanzamiento de 1€ (además del envío). Cuenta con consignas en la localidad de Petrer (Alicante) con expectativas de crecimiento de puntos de recogida Drop-Point en España.
La importancia de las consignas de recogida es una realidad. El primer ejemplo es la apuesta de la división tecnológica de El Corte Inglés, ofreciendo sus consignas «Smart Lockers» creación de INVES. El segundo ejemplo es el Metro de Madrid, que ya tiene preparado el concurso de adjudicación de las consignas para las estaciones de la red de Metro.